Martínez Medina era una persona diabética y sufría de problemas cardiacos
El preso político Jesús Martínez Medina, de 36 años, y quien se encontraba detenido desde el pasado 29 de julio en Anzoátegui, falleció bajo custodia del Estado este jueves 14 de noviembre.
Sus familiares confirmaron su deceso al medio digital El Pitazo. Además, el político opositor en el exilio Eduardo Battistini también informó de la muerte de Medina en su red social X, antes Twitter.
Hoy nos duele profundamente anunciar la trágica muerte de Jesús Manuel Medina, un joven venezolano que estaba injustamente encarcelado por la dictadura de Maduro desde el pasado 28 de julio. Su ‘delito’ fue ser testigo electoral de @EdmundoGU en las elecciones presidenciales, un derecho fundamental que el régimen convirtió en motivo de persecución. Jesús pasó sus últimos días preso, víctima de un sistema que castiga la verdad y la esperanza de cambio», escribió el dirigente de Primero Justicia.
El pasado 8 de noviembre el exfiscal Zair Mundaray denunció las críticas condiciones de salud de Martínez Medina. «Tiene diabetes tipo II y un problema cardíaco. En la sede de la policía donde estaba detenido en Lechería, estado Anzoátegui, le salieron unos nacios (abscesos en la piel que se llena de pus) nunca le prestaron atención médica hasta que se le infectó toda la pierna», describió en X.
El Pitazo dijo que el fallecimiento lo confirmó la madre del joven, a quien detuvieron el 29 de julio en el municipio Aragua, de Anzoátegui, en el sector conocido como plaza El Carmen.
Martínez Medina fue testigo electoral en la escuela Guzmán Bastardo de esa localidad durante las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio.
Después de que le salieron los abscesos lo llevaron al hospital Luiz Razzetti de Barcelona, donde se mantuvo hasta que se confirmó su muerte.
«Jesús es uno de los muchos venezolanos que han sufrido bajo esta represión. Su muerte nos recuerda la valentía de quienes alzan la voz por un país libre y democrático, y la urgencia de seguir luchando para que estas injusticias no queden en silencio. A su familia y seres queridos, les enviamos nuestras más sentidas condolencias. No descansaremos hasta que la justicia y la libertad vuelvan a Venezuela», agregó Battistini sobre este caso.
Las denuncias de los familiares de presos políticos
En las últimas semanas familiares de los presos políticos han realizado vigilias en las cárceles donde los recluyeron tras las protestas poselectorales, además de reunirse con el fiscal Tarek William Saab, y denunciar las críticas condiciones en las que se encuentran por la falta de acceso a alimentos adecuados, agua potable y el convivir con presos comunes, entre otras quejas.
A estas acciones el gobierno ha respondido con críticas como las del ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, quien este miércoles 13 de noviembre en su programa semana de televisión acusó a la oposición, encabezada por María Corina Machado y Edmundo González Urrutia, de enviar a los adolescentes a las calles a generar violencia.
Dijo que los familiares deberían reclamarle a los dos políticos, como parte de la narrativa oficial de que los presos políticos son «terroristas» y por eso se encuentran tras las rejas.
Mundaray escribió que a Martínez Medina le negaron realizarse un eco para evaluar si necesitaban amputarle la pierna porque el juez no había firmado la orden.
«Debía hacerse un eco para mirar si la pierna debía amputarse y no lo dejaron salir porque un juez no había firmado la orden, su madre estuvo en tribunales en Barcelona y le dijeron que tenía que hacer gestiones por Caracas», aseguró en el post donde denunció las condiciones de salud del joven.
ué dijo el fiscal Saab de los presos políticos
Según la ONG Foro Penal en Venezuela hay 1.836 personas detenidas por motivos políticos desde el 29 de julio cuando comenzaron las protestas por el desconocimiento de los resultados oficiales del Consejo Nacional Electoral (CNE), que ese día proclamó la victoria de Nicolás Maduro en las presidenciales.
Esta misma semana, el fiscal Saab afirmó que en el país no había presos políticos.
“Estas personas no son presos políticos, con criminales que se prestaron para acciones terroristas, delictivas, por los llamados comanditos para desencadenar en Venezuela una guerra civil, hubiera ocurrido lo mismo que en 2017, se proyectaban 3.000 muertes en varios meses, pero la respuesta del Estado y del pueblo lo impidió”, aseguró el 11 de noviembre desde la sede del Ministerio Público.
Un día después se reunió con familiares de algunos de los 69 adolescentes presos, a quienes prometió que habría liberaciones de aquellos que no cometieron delitos.
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