En este gran debate que hoy se está generando en el país sobre la convocatoria a las
elecciones parlamentarias nacionales y aún, cuando el organismo rector tiene una deuda con
los venezolanos ya que los resultados electorales no los han colocado en la página web y
oficialmente no sabemos quién ganó, la oposición democrática y triunfadora del 28 de julio,
son las que nos han mostrado las actas, decide ir a las elecciones las mismas deben ser
encabezadas por los presos políticos a nivel nacional. Es importante recordar que esos
detenidos de una manera injusta, arbitraria y violando los derechos humanos, tienen una
gran oportunidad de salir en plena libertad al salir electos diputados ya que la Constitución
Nacional los protege con la inmunidad parlamentaria.
Así se expresó el conocido comunicador social, analista político, ex-concejal y
fundador de varios gremios laborales en el Estado Trujillo, Héctor Díaz, quien hizo la
propuesta para ser estudiada por las organizaciones políticas a nivel nacional y quien
también hizo un argumento histórico: En el país hemos tenido grandes ejemplos con este tipo
de protección a la dirigencia política, recordemos el caso de David Nieves, quien salió electo
como parlamentario estando preso en el Cuartel San Carlos y justamente fue la Liga
Socialista con la unidad de las izquierdas que permitió dar este gran paso, igualmente ocurrió
con Salon Meza Espinoza, por cierto, un cuadro político del Movimiento Electoral del Pueblo
(MEP). En plena lucha armada de 1960 muchos dirigentes del Movimiento de Izquierda
Revolucionaria (MIR) y del Partido Comunista de Venezuela (PCV) salieron electos
parlamentarios teniendo juicios en tribunales militares, ahora se nos presenta una gran
oportunidad de sacar los presos políticos de las cárceles por la vía del voto.
Esto también le enreda el panorama al “gobierno” ya que se colocan en una disyuntiva
al no aceptar las postulaciones de los candidatos presos lo que generaría una reacción
internacional y una respuesta interna ya que el actual régimen quedaría completamente al
desnudo al no permitir la inscripción de una inmensa cantidad de venezolanos, violando
nuevamente los derechos políticos constitucionales. Esta propuesta se debe estudiar
seriamente con todas las organizaciones que han hecho vida activa alrededor del liderazgo
de María Corina Machado ya que ella representa el portavion electoral y es la genuina
representante, demostrado en las primarias y en las presidenciales del 28 de julio cuando
derrotó al gobierno con casi ocho millones de votos y si estos ocho millones de votos salen a
expresarse, el gobierno nuevamente sale derrotado, sin parlamento, sin gobernaciones y la
vuelta de la esquina con la juramentación del presidente electo Edmundo González. Ahora
que le tocaría, lo que queda de gobierno, darle el palo a la lámpara completo y acabarse de
declarar dictador, disolviendo la recién Asamblea Nacional electa.
