El Gobierno de Brasil se pronunció este sábado sobre la situación en Venezuela, sin felicitar a Nicolás Maduro, exhortó a respetar los derechos humanos, condenó la persecución contra opositores y exhortó al diálogo.
Así lo suscribe un comunicado del Ministerio de Exteriores del país vecino, presidido por Lula da Silva.
«El gobierno brasileño sigue con gran preocupación las denuncias de violaciones de los derechos humanos contra figuras de la oposición en Venezuela, en particular tras el proceso electoral celebrado en julio pasado. Si bien reconoce las medidas adoptadas por el gobierno de Maduro para aliviar las tensiones —como la liberación de 1.500 detenidos en los últimos meses y la reapertura de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Caracas—, el gobierno brasileño deplora los recientes episodios de detenciones, amenazas y persecución de opositores políticos», sentenció.
En esta línea, subrayó que el pleno funcionamiento de un «régimen democrático» requiere garantizar a los líderes de la oposición los derechos fundamentales a la libertad de movimiento, la expresión pacífica y la salvaguarda de su integridad física.
Además, instó a las fuerzas políticas venezolanas a entablar un diálogo y buscar el entendimiento mutuo, basado en el pleno respeto de los derechos humanos, como medio para resolver las disputas internas.
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